«No podemos permitirnos más abandonos», ha señalado Charles Leclerc casi nada más bajarse del coche decepcionado por su abandono cuando tenía la victoria en la palma de la mano, con los Red Bull bastante lejanos.
Simplemente, de repente y sin previo aviso el motor dijo ‘basta’. La caída de potencia tan repentina como brusca le hizo encaminarse hacia el box a baja velocidad mientras los otros coches le iban pasando.
«No sé por qué pasó. No había dado ninguna señal, no habíamos visto ninguna alerta… y de repente, perdí completamente la potencia. Sólo puedo decir que sucedió esto», ha señalado el monegasco.
Es un abandono que pesa. 25 puntos que se esfuman; de acariciar el salir de Barcelona con 27 puntos de ventaja sobre Max Verstappen a hacerlo seis puntos por detrás. Pero era algo que desde el box, cuando George Russell estaba aún delante, con Sergio Pérez achuchándole y Max sólo tercero, ya comenzó a intuir. «El liderazgo se reducirá a nada… o incluso lo perderemos», señaló, pero intentando evitar ver cómo iba la carrera.
«Obviamente el resultado hace daño porque ha sucedido en una carrera que estábamos dominando, que gestionábamos muy bien… pero el Campeonato es muy largo y tengo confianza en el coche. Hasta ahora no habíamos tenido problemas de fiabilidad y todos en el equipo están haciendo un buen trabajo», ha señalado.
Los abandonos son cosas que pasan. Max lo ha sufrido en dos ocasiones este año. Pero Charles está esperando que los ingenieros diagnostiquen el problema. «Debemos analizarlo porque no podemos permitir que nos vuelva a ocurrir otras veces. Hay que encontrar la raíz del problema».
Pese a la decepción, Charles quiere cargar pilas rápidamente. La próxima cita es la semana que viene en Mónaco, su casa… donde no ha tenido mucha fortuna hasta ahora y quiere no sólo sacarse ese ‘sambenito’, sino recuperar el liderato.
«En momentos así, lo importante es mirar los aspectos positivos y creo que ha habido muchos. Es que estábamos dominando la carrera, que nuestra competitividad es buena, que los estamos haciendo muy bien y que los desarrollos que hemos traído funcionan».
«Hemos sido rápidos, hemos tenido buen ritmo y hemos superado los problemas de degradación de gomas de pruebas anteriores, que han sido nuestra debilidad. Todo ello nos hace mirar el futuro con optimismo».
