A la hora de elaborar la campaña de marketing de un coche, uno de los principales argumento de venta es el diseño porque la decisión de compra, en muchas ocasiones, empieza por esta cualidad, aunque luego en la ecuación también entren en juego otros factores como el precio, el equipamiento o los opcionales disponibles.
La personalización ha ganado mucho peso en las marcas. Dar al cliente alternativas que le permitan configurar el coche a su gusto personal, diferenciándose del resto, es una posibilidad cada vez más frecuente. Llantas de diferente tamaño, tapicerías en distintos acabados y una extensa gama de colores hacen las delicias para los más sibaritas. Precisamente aquí es donde FIAT ha decidido actuar y reducir su oferta cromática. Y ha contado sus motivos para hacerlo.
Los italianos son muy particulares a la hora de diseñar, fabricar y vender un coche. En el pasado, las alternativas estaban limitadas a las marcas de lujo. Henry Ford siempre comentó que en su marca habría muchas opciones de colores, siempre y cuando este fuese el negro. Las cosas han cambiado mucho en este siglo y sólo hay que asomarse a la ventana para descubrir que los colores inundan nuestras calles y garajes. Destacar del vecino siempre ha sido el argumento de venta definitivo. Rojos, verdes, azules y hasta amarillos, aunque siempre hay tres tonos que predominan sobre el resto.
Estos son el blanco, el negro y el gris, colores que muchas veces no suponen un gasto añadido a la hora de comprar un coche. He ahí por qué la decisión tomada por FIAT es, cuanto menos, sorprendente. Los turineses han decidido que eliminarán de su gama cualquier color que no se identifique con su filosofía italiana. El color gris ha sido el primer sacrificado. Ya no habrá FIAT grises y no será que no hay unos cuantos circulando por la calle. Es uno de los tonos más solicitados por los compradores, así que, quien quiera uno, más vale que se dé prisa para visitar el concesionario.
El CEO de Fiat, Olivier Francois, ha sido el encargado de dar la primicia a todos los medios: «Rompemos las reglas: hemos decidido detener la producción de coches grises de FIAT. Esto es desafiante y disruptivo y tiene como objetivo reforzar aún más el liderazgo de FIAT como la marca de la alegría, los colores y el optimismo. Esta elección comunica aún más a la gente los nuevos valores de la dolce vita y el ADN italiano que encarna la marca. La eliminación del color va acompañada de un nuevo eslogan: Italia. La tierra de los colores. FIAT. La marca de los colores».
El cambio definitivo se producirá con el lanzamiento del FIAT 600. Aunque todavía quedan unas cuantas semanas para que se desvele oficialmente, ya hemos podido verlo al completo gracias a unas fotos espía. Será el sustituto natural del FIAT 500X. Un crossover del segmento B que apostará por la diversidad mecánica, incluyendo versiones 100% eléctricas. Este no será el único modelo de la casa turinesa en abrazar la electrificación. A principios de año, FIAT anunció la llegada de dos eléctricos antes de final de curso. El 600 será el primero y el segundo apunta a que será el FIAT Panda. Ambos, con tecnología compartida del Grupo Stellantis.
