Robusta, con buen espacio, asistencias en la conducción y un diseño exterior llamativo. Probamos la Fiat Pulse Impetus, y esta fue la experiencia.
Fiat Pulse llega este 2022 a Latinoamèrica para fortalecer el portafolio de la marca italiana. Este modelo llega a competir en el segmento de las SUV subcompactas donde el fabricante actualmente no tenía participación, luego de la salida del Fiat 500 X, quien en su momento tuvo èxito por su diseño y motorización.
Actualmente varias marcas han querido tomar la iniciativa de crear vehículos para la región y no migrados de Europa, Asia o Norteamérica. Volkswagen ya lo había hecho con Nivus, Renault con Oroch y ahora Fiat lo hace con el Pulse, un vehículo pensado, desarrollado y fabricado en la planta de Betim, Brasil.
Con un recorrido de 400 kilómetros entre ciudad y carretera, conocimos de primera mano el Fiat Pulse en su versión tope o Impetus, con motor turbo.
A favor
– Conectividad multimedia
– Altura con respecto al suelo
– Carga en asistencias en la conducción
– Respuesta óptima del motor
– Iluminación exterior
– Espacio del maletero
– Calidad de la cámara de reversa
Por mejorar
– Solamente cuenta con cuatro Airbags
– Acabados y apariencia de plásticos interiores
– Agilidad de la transmisión
– Gran Turbo Lag al arrancar
– Golpes secos de la suspensión trasera
– Calidad de las bocinas o parlantes
Estéticamente el Fiat Pulse demuestra rudeza e imponencia, con líneas cuadradas en su carrocería. En la parte frontal destaca la parrilla de gran tamaño con el emblema de la marca. Se complementan con un conjunto óptico en LED para DRL y antiniebla, además de luces medias. El bumper tiene un sky plate en tonos aluminio.
De costado destacan rines bitono de 17 pulgadas, enmarcados por pasos de rueda en plástico negro mate y bajos en el mismo material. Cuenta con Keyless Entry en la puerta del conductor, espejos bodycolor con direccional integrada y barras de techo metálicas. Esta versión muestra una carrocería en color contraste.
En la parte trasera llaman la atención unidades ópticas en LED con forma alargada, sin luz antiniebla trasera. El bumper tiene líneas agresivas, con un difusor en negro mate, contrastado con gris humo y salidas de escape falsas. Sobre el techo hay un spoiler en negro brillante.
