Ante el aumento de calendario y nuevas carreras que la F1 ha incluido recientemente y planifica para el futuro inmediato, Sebastian Vettel ha querido recordar a Liberty Media que la categoría reina no debería deshacerse de las pruebas con mayor calibre histórico y tradición.
En 2021 la F1 vivió la novedad de Catar y Arabia Saudí en su calendario, más allá de la frustración de Vietnam. Para 2022, el GP de Miami entra en el calendario, antes de que en 2023 ingrese Las Vegas y potencialmente Sudáfrica. En vistas a la lluvia de nuevos paraderos para el Gran Circo y la posibilidad de perder Mónaco o Bélgica, Vettel invita a la F1 a reflexionar.
«Siempre es emocionante ir a lugares nuevos, como cuando regresamos a Estados Unidos o fuimos a Singapur. Sitios especiales donde visitarlos supone añadir algo nuevo al calendario. Siempre que no perdamos lugares a los que hemos ido tantas veces», ha expuesto Vettel.
«Perder Melbourne del calendario sería horrible, de la misma forma que perder algunas citas históricas de Europa sería horrible. Sé que todo se basa en los intereses financieros de ir a los sitios nuevos y que la F1 es un negocio», ha añadido.
Una idea que las altas esferas del Gran Circo barajan y que el mismo germano vería con buenos ojos es tener un calendario rotativo, donde ciertas pruebas de la temporada se mantendrían fijas, y otro significativo número organizaría una carrera cada dos años, cediendo su espacio un año de por medio.
«Yo veo a la F1 como un deporte, una pasión, no un negocio y para mí las carreras históricas tienen un significado especial. Así que tenemos que buscar un balance entre explorar nuevos lugares y mantener los eventos históricos», ha apuntado.
«Es inimaginable quedarnos sin Italia, por ejemplo. Algo tendremos que hacer para que no pase esto».
