Bollinger cambia de tercio. Hasta ahora, la marca siempre había destacado por el desarrollo y producción de vehículos tipo todoterreno eléctricos (B1 y B2) o, incluso, una furgoneta eléctrica denominada Deliver-E. Sin embargo, a comienzos de este año ya anunciaron su nueva dedicación sobre modelos de corte industrial, lo que ha derivado en la presentación de su primer camión eléctrico denominado Bollinger B4 y que promete muchos enteros en cuanto se inicie su comercialización.
El pasado mes de enero, la compañía fundada en 2014 con el objetivo puesto en dotar al mercado de “auténticos todoterreno eléctricos” cambiaba de paradigma debido a las enormes dificultades con las que se había topado en su recorrido vital. El propio Robert Bollinger, hizo públicas estas declaraciones a través de un vídeo publicado en el perfil oficial de la empresa en Youtube e Instagram. En dicho metraje, el fundador agradecía el apoyo recibido durante su trayectoria y anunciaba el inicio del desarrollo de flotas comerciales, dejando a un lado su proyecto inicial.
Durante aquella intervención, Bollinger presentó su primera plataforma dedicada a vehículos comerciales de gran tamaño (de Clase 3 a 6, según la FHWA americana). En el listado de posibles modelos que aceptarán dicha plataforma se encuentran desde los modelos todoterreno ya presentados (B1 y B2), autobuses y camiones (Clase 4), camiones de dos ejes y seis ruedas (Clase 5) y camiones de un bloque y tres ejes (Clase 6).
El primero en llegar a la gama comercial de la compañía será el llamado Bollinger B4, un camión eléctrico de Clase 4. La firma aún no ha dado grandes detalles o especificaciones al respecto, aunque sí admiten que su diseño será clave en “proporcionar seguridad y confort al volante” debido a la elevada visibilidad exterior que promete. “Escuchamos a nuestros nuevos clientes comerciales y desarrollamos lo que necesitan para lograr la máxima eficiencia”, admitió Robert Bollinger en su presentación.
Además de la mencionada visibilidad al exterior, el B4 promete un radio de giro de apenas 12,5 metros, mucho más pequeño que en modelos con una distancia entre ejes comparable. Esto, según admiten desde la compañía, promete una mejora dinámica del camión eléctrico y un manejo mucho más optimizado para entornos urbanos o rurales de complicado acceso.
El Bollinger B4 está impulsado por un bloque motor e-drive que detona su potencial en el eje trasero para así facilitar el desplazamiento de cargas elevadas. El modelo cuenta con una arquitectura eléctrica de 800 voltios y unas baterías LFP (fosfato de hierro y litio). Cada vehículo podrá equiparse con dos paquetes de baterías que dotan al camión eléctrico de alrededor de 160 kilómetros cada una, lo que supone un máximo de 320 kilómetros aproximadamente en caso de montarse ambos paquetes.
Por el momento la firma norteamericana no ha dado más detalles técnicos concretos, ni tampoco de precio o inicio concreto de la producción. Desde Bollinger han asegurado que estos datos “serán publicados próximamente”. La directiva de la compañía también han especificado que sus próximos modelos en ser presentados serán dos camiones eléctricos adicionales de tamaño superior (Clase 5 y Clase 6).
