La industria del automóvil atraviesa un momento difícil por la crisis de los semiconductores y la incertidumbre económica derivada de la pandemia, pero nada de eso parece afectar a Rolls-Royce.
La marca de lujo británica ha cerrado en 2021 el mejor año de su historia con un total de 5.586 unidades vendidas en todo el mundo, lo que supone un incremento del 49% respecto al ejercicio anterior.
También le permite batir sus propios récords en mercados estratégicos como el chino o el estadounidense, así como en el área del Pacífico.
Los hitos de Rolls-Royce en 2021 fueron el comienzo de la comercialización de la nueva generación del Ghost y el anuncio de la creación de su primer eléctrico, que se llamará Spectre y llegará al mercado a finales de 2023.
«2021 fue un año fenomenal para Rolls-Royce Motor Cars», ha dicho el director ejecutivo de la compañía, Torsten Müller-Ötvös.
«Entregamos más vehículos que en cualquier otro momento de nuestros 117 años de historia. La demanda de todos los productos en los distintos mercados globales no tuvo precedentes».
«La extraordinaria solidez de nuestro portafolio, una oferta de personalización excepcional, así como el primer año completo de disponibilidad del Ghost y la presentación del Black Badge Ghost en octubre, han contribuido a este rendimiento tan bueno».
«Esto resulta realmente alentador en un momento en el que nos estamos preparando para la histórica presentación del Spectre, nuestro primer coche completamente eléctrico».
Rolls-Royce calcula que hasta el tercer trimestre no podrá atender todos los pedidos que tiene en estos momentos, lo que hace presuponer que 2022 será otro año sólido para la marca.
La compañía también dice que nunca había recibido tantas solicitudes de personalización, aunque no da cifras concretas de estos proyectos.
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