Lanzado originalmente en 1999, el Kia Carens ha sido desde su nacimiento un monovolumen, pero ahora la marca coreana ha estrenado la cuarta generación del modelo, y lo ha convertido en un SUV, lo cual no es una gran sorpresa, dado el éxito de este tipo de vehículos.
El modelo tiene ahora un aspecto más robusto, en línea con los modelos SUV del fabricante, como el Kia Sportage (faros, pilotos, etc…), aunque mantiene la practicidad de un monovolumen o ‘minivan’, según la marca.
En lo que a medidas se refiere, hablamos de un modelo de 4,5 metros de largo, 1,8 metros de ancho y 1,7 metros de altura, con una distancia entre ejes de 2,78 metros. Esto lo hace un poco más grande que su predecesor, y también algo más alto, aunque la batalla ha crecido notablemente, lo que aumenta la habitabilidad.
La línea de techo, prácticamente recta, garantiza también un buen espacio para la cabeza de los ocupantes de la parte trasera. En este sentido, cabe apuntar que Kia ofrecerá configuraciones de seis y siete plazas, en el primero de los casos con dos asientos individuales, estilo ‘Capitán’, en la segunda fila de asientos.
El habitáculo también se ha renovado por completo, con un aspecto general más moderno, gracias a un cuadro de instrumentos completamente digital o a una pantalla multimedia de 10,25 pulgadas. Todavía se mantienen, no obstante, mandos físicos para el control de la climatización.
