El CEO de Rivian avisa: la falta de baterías dejará a la escasez de chips como un problema menor

0
331
ceo

Rivian es una de las compañías más prometedoras en cuanto a producción de coches eléctricos, y su CEO, JC Scaringe, se ha pronunciado sobre la potencial falta de baterías que sufrirá la industria del automóvil durante las próximas dos décadas.

Con una situación en cuanto a abastecimiento de semiconductores que sigue dando coletazos ya adentrados en 2022, la industria mira con recelo a otro frente que se abre en lo relativo a baterías, pues con los coches eléctricos apenas suponiendo el 10 % de las ventas mundiales de automóviles, los fabricantes apenas pueden seguir el ritmo de la demanda con su producción.

El llamativo comentario del CEO de la firma americana se han producido en una entrevista publicada por el Wall Street Journal. En la misma, Scaringe asegura que actualmente tan sólo existe un pequeño desequilibrio entre la oferta y la demanda de baterías, pero que la crisis a causa de la falta de semiconductores que estamos viviendo es tan sólo «un pequeño aperitivo» de lo que está por venir, ya que el desequilibrio aumentará conforme la demanda aumente.

Los fabricantes que primeros se aseguraron acuerdos con especialistas como LG o Panasonic, son los que menos están sufriendo en estos primeros compases la cada vez más intensa demanda. A ello hace referencia Scaringe al comentar que aunque él no estuviera en la tesitura de haber decidido sobre ello 10 años atrás, hubiera sido de los primeros en tratar de asegurarse un suministro de celdas para, tanto en la actualidad como en un futuro próximo, poder cumplir con su ritmo de producción.

A ello hay que sumar, además, que la producción de baterías tanto en Europa como Estados Unidos dependen en gran medida de los países en los que se extraen las materias prisas, generalmente de difícil acceso a causa de sus políticas.

Comenta el CEO de Rivian en otra entrevista, por separado, de la CNBC: «La mayoría de los países del mundo dejarán de vender automóviles con motor de gasolina. La escala del cambio es difícil de apreciar completamente. El desafío es si está impulsado por la política o no. Las empresas que van a sobrevivir son las que reconocen que el estado final de la combustión es cero».

Los comentarios de Scaringue se contraponen, de plano, con los que el CEO de un peso pesado de la industria ha hecho recientemente; Oliver Zipse, de BMW. El alemán, por su parte, señalaba días atrás que aún queda camino por recorrer a los motores de combustión interna. Decía que si él mismo no vende coches con motores de combustión interna «alguien lo hará». También señaló a la situación en cuanto a suministro de materias primeras para la fabricación de baterías para coches eléctricos, poniendo a China en el punto de mira.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí