Desde su debut inicial en 2015, el Renault Kwid se posicionó como el carro más asequible de la marca para diversos mercados emergentes, entre ellos América Latina. Nació a gasolina, pero en 2019 dio el salto a lo eléctrico con el K-ZE, luego llamado Kwid E-Tech; y un año después llegó a Europa como Dacia Spring. Ahora, tras ese largo recorrido que también incluyó su actual producción en Colombia, a nivel mundial ya se trabaja en su reemplazo.
Y es que, por primera vez, la próxima generación del Kwid apareció en una ilustración oficial, divulgada hace un tiempo por Denis Le Vot, ex CEO de Dacia. Según medios europeos, nacerá ante el mundo como el nuevo Dacia Spring a mediados de 2026, reforzando el concepto del modelo actual a nivel estético y funcional. Es decir, será un carro urbano y asequible, pero ahora con una estética SUV aún más marcada.
Pero, más allá de su estética, hay un cambio muy importante. En esta nueva entrega, el Kwid, o más bien el Dacia Spring, se concibe desde el principio como un carro eléctrico destinado al mercado europeo. Seguramente habrá alguna adaptación para tener mecánica a gasolina, y que en algún momento deberá tomar el lugar del modelo actual que se produce en nuestro país. Veamos, por ahora, qué se sabe.
El próximo Renault Kwid: con ADN SUV y más tecnología
La imagen divulgada revela que el próximo Renault Kwid tendrá un diseño más robusto, claramente inspirado en las actuales Dacia Duster y Bigster. Según se ve, la silueta cambia hacia un estilo de mini-SUV urbano, dejando atrás las proporciones de «hatchback alto» que lo caracterizaron hasta ahora. Se habla de una carrocería cercana a los 3,75 metros de largo (el actual llega a 3,68 metros), con un maletero más grande y espacio para cuatro ocupantes.
Por dentro, la apuesta también será más ambiciosa. El futuro Kwid eléctrico adoptará la plataforma AmpR Small, compartida con los Renault 4, 5 y el próximo Twingo, lo que le permitirá tener mayor conectividad, nuevas asistencias a la conducción y mejores estándares de seguridad. Por su parte, el modelo a gasolina deberá seguir en una configuración más sencilla y enfocada en el bajo costo, manteniendo así su papel como carro de entrada.
Las primeras informaciones apuntan a que la versión eléctrica tendrá un motor de unos 65 hp, con baterías LFP de origen CATL, acercándose en esto último a lo que hoy ofrecen los eléctricos chinos. Su autonomía rondaría los 200 km bajo ciclo WLTP, pensada para un uso esencialmente urbano. Eso le permitirá ubicarse un escalón por debajo del futuro Twingo E-Tech, que podría ofrecer hasta 300 km y un motor más potente de 85 hp.
¿Rivales o hermanos?
Aunque los futuros Kwid (Dacia Spring) y Twingo comparten arquitectura, Renault planea diferenciarlos de forma clara para evitar confusiones. El Kwid E-Tech se orientará a quienes busquen un carro eléctrico de precio accesible y con un enfoque más básico en cuanto a equipamiento. Mientras tanto, el Twingo E-Tech tendrá un diseño retro-futurista, más tecnología y asistencias, y una autonomía superior.
La estrategia permitirá que los dos convivan en la gama eléctrica de Renault, sin estorbarse. El Kwid o Spring mantendrá su papel como modelo popular, heredando esa tradición que inició hace una década. Por su parte, el Twingo se proyecta como una propuesta más aspiracional, dirigida a quienes estén dispuestos a pagar un poco más por mayor tecnología y alcance.
