Red Bull Racing competirá en Fórmula 1 con sus propios motores a partir de 2026 a través de Red Bull Powertrains, una nueva división en Milton Keynes que será responsable del desarrollo y la producción de esas unidades de potencia.
Para evitar afrontar este duro reto en solitario, el equipo ha unido fuerzas con Ford, que desde hace tiempo está trabajando duro en el desarrollo de piezas, centrándose por ahora sobre todo en las más complicadas.

Entre otras cosas, Ford utiliza piezas que salen de su impresora 3D. La marca lo hace mediante métodos de prueba que también se utilizan en la industria aeroespacial. Christian Hertrich, director de tren de potencia de Ford Performance Motorsports, calcula que Ford ya ha producido entretanto unas mil piezas para Red Bull.
«No son cosas como tuercas y tornillos y cosas fáciles», asegura Hertrich. «Son piezas complejas de metal y polímeros que se prueban hasta el límite para que puedan soportar carreras a una velocidad media de 320 kilómetros por hora».

En el equipo de desarrollo de tecnología de fabricación de Ford, Keith Ferrell es el responsable de las piezas impresas en 3D. Según él, este método permite a Ford fabricar piezas que normalmente no pueden producirse de forma tradicional. Por ejemplo, placas de refrigeración para baterías y otras piezas. Para garantizar que estos elementos de la impresora 3D son sólidos, se comprueba su resistencia mecánica, dureza y conformidad geométrica, lo que se hace mediante escaneado 3D. Dentro de Ford, el llamado equipo de evaluación no destructiva debe crear y examinar modelos digitales de esas piezas antes de fabricarlas.
Para el desarrollo, Ford reunió a varios empleados de distintos departamentos. Entre ellos, empleados responsables de nuevos vehículos, sistemas térmicos y desarrollo de baterías.
«Involucramos a todos estos equipos de Ford con todas estas áreas de experiencia para que ayudaran en el programa», explica Hertrich. «No sólo el grupo de automovilismo está trabajando en esto. Es increíble ver cuántas partes diferentes de la empresa están ya involucradas».

Red Bull seguirá corriendo con unidades de potencia Honda en la Fórmula 1 en 2025, pero esa exitosa asociación llegará a su fin después de esta temporada. El proveedor de motores japonés siguió suministrando motores a Red Bull en los últimos años, a pesar de que se había retirado de la Fórmula 1 sólo de nombre. A partir de 2026, Honda suministrará motores únicamente a Aston Martin y Red Bull arrancará oficialmente la era con Ford.