Franco Colapinto ha vuelto a sufrir un Alpine muy poco o nada competitivo en Bakú. El argentino, en el circuito de sus primeros puntos hace un año, ha tenido un fin de semana duro, en el que no ha visto opciones para luchar por estar entre los diez primeros. Otra carrera de la que él y el equipo se van con las manos vacías.

Colapinto ha dado pasos adelante en las últimas carreras, hasta el punto de superar a su compañero de equipo en las dos clasificaciones más recientes. Es evidente que poco a poco se va viendo una versión mucho más óptima del argentino, pero si el coche no está a la altura, es mucho más difícil ver las cosas. De momento, el bajo rendimiento del A525 hace imposible que se le presenten opciones de sumar puntos.

Colapinto remarca que ha sido un domingo difícil, en el que además de no tener ritmo, ha visto como un toque con Alexander Albon le ha hecho perder más tiempo todavía. El tailandés ha sido sancionado con diez segundos por ello, pero el argentino ha perdido hasta 12 junto a sufrir varios daños en el alerón delantero que han hecho el coche todavía más difícil de pilotar de lo que es.

«Ha sido un día duro, no hemos tenido ningún ritmo hoy. Hemos sufrido mucho con el coche, con el ritmo, necesitamos seguir trabajando para mejorar. He perdido mucho tiempo por el toque con Alex, 12 segundos creo y luego un alerón delantero que me ha hecho tener mucho sobreviraje, bloqueo de neumáticos, ha sido duro. No teníamos ritmo y tenemos que mejorar», ha reconocido Colapinto tras el GP de Azerbaiyán.
Preguntado acerca de dónde pueden mejorar para luchar más arriba, Colapinto no tenía respuesta, sólo que lo intentarán todo. El argentino, de hecho, se ha marchado rápido, con esa frustración que tiene al no poder demostrar todo su potencial dado el bajo rendimiento del A525 en las últimas carreras.












