China ha reactivado con fuerza su ambicioso proyecto de un corredor ferroviario bioceánico que unirá Brasil y Perú, atravesando el núcleo de Sudamérica. Esta iniciativa tiene como objetivo facilitar el comercio entre Brasil y Asia, permitiendo un acceso más eficiente a este importante mercado.
Después de años de discusión y análisis, el proyecto busca disminuir de manera significativa los tiempos y costos logísticos de las exportaciones brasileñas hacia el mercado chino, evitando la dependencia del Canal de Panamá y las rutas marítimas del Atlántico, lo que optimiza el intercambio comercial.
El 16 de abril se anunció que la conexión ferroviaria, que partirá hacia el Megapuerto de Chancay, se encuentra cada vez más cerca de hacerse realidad. Este avance coincide con la próxima visita del presidente brasileño Lula Da Silva a China, programada para el 12 y 13 de mayo. Durante su estancia, Da Silva se reunirá con funcionarios del Ministerio de Transporte de China, así como con representantes de China State Railway Group, la empresa encargada de la construcción del ferrocarril.
Como resalta el diario mexicano El Imparcial, «China busca construir un tren de Brasil hacia el megapuerto de Chancay en el Perú». Esta visita de Lula a China representa un paso significativo en el seguimiento de los acuerdos establecidos entre Lula y el presidente chino Xi Jinping durante la visita de Estado de este último a Brasil en noviembre del año anterior.
En el mismo sentido informa la agencia de prensa del gobierno brasileño, Agencia Brasil, que directamente sintetiza: «Brasil y China discuten implantación del Corredor Bioceánico Brasil – Perú». El funcionario brasileño Marcus Cavalcanti, funcionario de la Casa Civil (Presidencia) llamó al Corredor «un gran sueño para Brasil».
China y Brasil impulsan el Corredor Bioceánico
Según la Agencia Brasil, Leonardo Ribeiro, Secretario Nacional de Transporte Ferroviario de Brasil, afirmó que el plan consiste en implementar un corredor ferroviario estructural destinado al transporte de carga, que se extenderá de este a oeste, atravesando estados como Bahía, Goiás, Mato Grosso, Rondônia y Acre. Esta infraestructura está diseñada para transportar toda la carga generada en la región central del país hasta el Megapuerto de Chancay en Perú.
Añade la agencia: «China debe elaborar un nuevo estudio para la implementación del corredor bioceánico Brasil -Perú, que debe crear una ruta y estratégica para el comercio internacional entre los dos océanos, expandiendo el comercio entre la China y el América del Sur».
En ese sentido, un grupo de 11 funcionarios de China State Railway Group (CSRG) y del Ministerio de Transporte de China ha llevado a cabo recientemente una gira de siete días por diversas regiones brasileñas. Durante esta visita, se evaluó la infraestructura existente y se exploraron oportunidades de inversión para el Corredor Bioceánico.
La delegación china mantuvo reuniones con representantes estatales de Matto Grosso, Goias, Rondonia y Acre, [estados fronterizos con el Perú y Bolivia, y la zona de influencia del Corredor bioceánico], para discutir las redes de carreteras, ferrocarriles y vías fluviales a construirse o mejorarse en Brasil. La delegación también visitó el puerto atlantico de Santos, uno de los más grandes de América latina, que está siendo ampliado con una inversión de US$ 486 millones por parte de la empresa agroindustrial China COFCO internacional.
El proyecto del Corredor Ferroviario Bioceánico, que contaría con una inversión inicial de Beijing de US$3.500 millones, tiene como objetivo permitir que Brasil y sus países vecinos eviten las tradicionales rutas marítimas del Atlántico, lo que se traducirá en una disminución significativa de los tiempos de tránsito y los costos logísticos para exportaciones agrícolas, tales como soja, carne y granos.
Gran parte de la infraestructura ferroviaria, fluvial y carretera ya está construida, faltando la optimización de tramos clave en Brasil y principalmente en el Perú, país que ya está realizando los estudios para el ferrocarril Chancay – Pucallpa – Cruceiro do Sul, además de las optimización de la Hidrovía Amazónica.
Importancia estratégica del Megapuerto de Chancay
La agencia de noticias Associated Press destacó la relevancia del puerto de Chancay, considerándolo crucial para el fomento de nuevas rutas comerciales en América Latina. Además, su desarrollo permitirá a China diversificar sus opciones de envío y disminuir su dependencia del Canal de Panamá, un «corredor que ha generado tensiones diplomáticas y geopolíticas con Estados Unidos por parte del Gobierno brasileño», según señaló el medio.
Joao Villaverde, funcionario del Ministerio de Planificación de Brasil, subrayó la necesidad de actualizar el proyecto del Corredor Bioceánico para que se ajuste a los cambios en las dinámicas comerciales e infraestructurales de la región. «Por ejemplo, hace 9 años no existía la Carretera del Pacífico, que ahora permite el viaje por carretera, motocicleta, camión o autobús desde los estados de Rondonia y Acre hasta Lima o Chancay», explicó.
Esto, en referencia a los estudios ya mencionados elaborados en los años anteriores, previos a la inauguración del Megapuerto de Chancay en noviembre de 2024 por el presidente chino Xi Jinping.
Crecimiento del comercio transfronterizo
Villaverde destacó que el comercio transfronterizo entre Brasil y sus países vecinos—Perú, Bolivia, Ecuador y Paraguay, en particular—ha experimentado un crecimiento significativo. En este sentido, mencionó un aumento del 130% en las exportaciones brasileñas desde enero hasta marzo de 2025, en comparación con el mismo periodo del año anterior, específicamente en Assís, Brasil, una ciudad fronteriza situada en el estado de Acre, adyacente a las fronteras con Perú y Bolivia.
Este incremento sugiere que las inversiones en esta área podrían ser rentables y potencialmente estimular aún más el comercio intrarregional en Sudamérica. En este contexto prometedor pero también riesgoso, Villaverde enfatizó que Perú debe fortalecer su unidad nacional, especialmente ante la guerra comercial que Estados Unidos ha emprendido contra varios países, con especial enfoque en China.
