Max Verstappen y Red Bull han conseguido una victoria muy importante en el Gran Premio de Hungría. Un triunfo que parecía ayer casi imposible, pero la Scuderia Ferrari ha vuelto a fallar en cuanto a la estrategia. ‘Regalo’ incluido, los de Milton Keynes se van de vacaciones con el campeonato muy bien encarrilado.
En el equipo Red Bull se llevaron un serio ‘palo’ en la clasificación de ayer, ya que Sergio Pérez se quedó en la Q2 debido al tráfico y Max Verstappen sólo pudo ser décimo tras cometer un error en su primera vuelta de la Q3 y tener problemas de motor en su intento definitivo.
En un circuito como el de Hungaroring, donde suele ser complicado adelantar, parecía que la marca de bebidas energéticas ya no tendría opciones de victoria en la carrera de hoy. Pero la estrategia también jugaría su papel, y en ese sentido han vuelto a estar un paso por delante de sus rivales.
La primera ‘minivictoria’, de hecho, ha llegado antes de la carrera. Con la llegada de algunas gotas de lluvia antes del inicio, los Red Bull han decidido salir con neumáticos blandos para atacar desde la salida y hacer pronto la primera parada; en Ferrari, por su parte, han preferido salir con gomas medias y, para más inri, después simplemente se han dedicado a reaccionar a las estrategias de los demás.
Mientras los Red Bull o George Russell paraban pronto por la ‘caída’ de sus blandos, desde Ferrari decidían no alargar demasiado sus gomas medias. Pese a todo, Charles Leclerc ha podido pasar a Russell en la vuelta 31 y lideraba la carrera con solvencia. El monegasco parecía encaminado hacia la victoria.
Sin embargo, desde Red Bull han decidido pasar al ataque en la vuelta 39 y, con una segunda parada en ‘boxes’ para Max Verstappen, han conseguido el ‘undercut’ sobre George Russell. El pánico ha llegado entonces al muro de Ferrari y han decidido volver a parar con Charles Leclerc… pero estaban obligados a montar un neumático duro que no funcionaba bien hoy.
En esa tesitura, el neerlandés entraba de lleno en la pelea por la victoria ante un Leclerc que estaba ‘indefenso’ con sus gomas duras. Y, como era previsible, no ha tardado en adelantar a su rival por el título con una bonita maniobra en la primera curva.
Ni siquiera un error de Verstappen a la salida de la curva 13, con trompo incluido y pérdida de posición ante Leclerc, ha dado opciones al monegasco. Apenas unas vueltas después, el piloto de Red Bull ha vuelto al ataque y ha regresado de nuevo a lo más alto de la carrera.
Ferrari había vuelto a morder el anzuelo y Red Bull estaba ahora en una posición inmejorable para ganar. Al final, Max Verstappen pasaría bajo la bandera a cuadros en la primera plaza y conseguiría su 28ª victoria en la Fórmula 1.
Una victoria que significa tener ya 80 puntos de ventaja sobre Charles Leclerc en el Mundial. Además, en el certamen de constructores, la diferencia entre Red Bull y Ferrari es ya de 97 puntos. Verstappen y Red Bull también aceptan ‘regalos’… y se van de vacaciones en una situación muy favorable.
