Carlos Sainz era ‘otro hombre’ al entrar en el Red Bull Ring. Su rostro parecía otro, más distendido, menos preocupado. Y no es para menos, el madrileño franqueaba por vez primera las cancelas del paddock como ganador de un Gran Premio.
Sereno, alegre, distendido… pero dejando claro que piensa seguir batallando y plantando cara. Hace apenas tres semanas aún creía el título posible y sin duda lo del pasado domingo en Silverstone habrá reafirmado su propósito.
«Resulta muy difícil explicar lo que sucede dentro de tu cabeza cuando logras tu primera victoria en F1. Sólo puedo decir que ha sido una sensación grandiosa que todavía, paso a paso, estoy asimilando. No he tenido mucho tiempo para saborearla, porque han pasado apenas cuatro días y ya volvemos a estar en pista», dijo Sainz en su rueda de prensa.
Se ha quitado un peso de encima. Ahora ya sabe que puede hacerlo, que puede repetirlo y sin duda volverá a intentarlo ya otra vez este fin de semana en Austria.
«Si hay algo que me ha dado esta primera victoria son más ganas de repetir otro triunfo lo antes posible», dijo Sainz. Y la primera oportunidad es aquí en Austria.
«Será un fin de semana intenso, porque tendremos carrera sprint. Iremos directamente de los Libres 1 a la Clasificación y tendremos que encontrar muy rápido el set-up adecuado. Y después tendremos dos carreras. Este circuito proporciona casi siempre buenas carreras y tiene tres zonas de DRS. En Silverstone comprobamos lo importante que continúa siendo el DRS. Si casi siempre se ven buenas carreras aquí, me imagino que este año todavía pueden ser mejores. Será una batalla intensa».
Obviamente le preguntaron si cree que Ferrari acertó con la táctica y el madrileño respondió dando muestras de gran madurez. «A la postre, Ferrari ha ganado y pienso que fue una decisión acertada el no haber dejado espacio en la reanudación. Se eligió asegurar la victoria de Ferrari. Cuando se dio aquella situación, sabía exactamente lo que debía hacer y creo que el equipo así lo entendió de inmediato».
Y cuando le preguntaron qué cosa había sucedido tras la carrera, Sainz ni se inmutó. «El briefing fue corto porque teníamos que hacer la foto de grupo y nuestro avión salía en poco tiempo. Además. Charles tenía que hacer el control antidoping. Ningún problema con él, se ha comportado como el caballero que es».
También explicó que la celebración en Maranello fue un gran momento: «Una acogida grandiosa y pude disfrutar de un día con mis amigos, que no habían estado nunca en Maranello. Incluso pude darles unas vueltas a Fiorano con el coche triplaza».
