Max Verstappen ha terminado la segunda sesión de entrenamientos libres del Gran Premio de Francia a más de medio segundo del Ferrari de Carlos Sainz, pero el neerlandés de Red Bull parecía estar ‘escondido’ en lo que a simulación de clasificación se refiere.
Max, de hecho, ha empezado los Libres 2 en muy buena forma, ya que ha batido a Charles Leclerc –por sólo diez milésimas– en su primer intento con el neumático medio.
El piloto de Red Bull, al igual que en los Libres 1, se presentaba en la zona noble como una de las fuerzas a batir, pero en el momento de exprimir los neumáticos blandos, se ha quedado muy lejos de los pilotos de la Scuderia Ferrari.
¿Malas noticias para Red Bull? En absoluto. El vigente campeón del mundo no sólo ha marcado buenos tiempos con el neumático medio al final de la sesión, en la tanda ‘larga’, sino que además Leclerc parecía tener serios problemas a la hora de gestionar sus neumáticos.
Mientras Verstappen llegaba a los instantes finales de la sesión marcando un 1’37’’735 en su novena vuelta de medios, Leclerc estaba en 1’38’’742 en su decimocuarta vuelta con el mismo compuesto y tanto Sainz como Hamilton –medios de 13 y 14 vueltas respectivamente– estaban en tiempos de 1’39’’0.
La diferencia entre Verstappen y Leclerc era superior a un segundo en ese momento, pero hay que tener en cuenta que las gomas del neerlandés eran siete vueltas más ‘frescas’. El ritmo, eso sí, parece muy bueno por parte del Red Bull.
Hay que recordar, obviamente, que en las sesiones de entrenamientos libres se desconoce la carga de combustible o los mapas de motor utilizados por cada uno, así que aún puede haber algo de ‘juego del escondite’ por parte de cualquier equipo.
Pero está claro que a Red Bull le vienen bien los circuitos ‘front limited’. Sufrieron con los neumáticos en Austria, donde las gomas traseras lo pasan mal en las curvas lentas, pero parece que el RB18 se mueve como pez en el agua en Paul Ricard.
Habrá que esperar a la jornada de mañana para ver quién tiene el coche más rápido y, por supuesto, al domingo para comprobar quién tiene el mejor ritmo. Pero, con permiso de Mercedes, Red Bull parece estar un paso por delante.
