Lando Norris espera como agua de mayo el GP de Gran Bretaña. No porque sea el Gran Premio ‘de casa’, sino porque espera que Silverstone sea un GP mucho más amable para McLaren.
«Tendremos piezas nuevas y el asfalto de Silverstone es completamente diferente al de Canadá. Además, será interesante ver si la nueva directiva contra el ‘porpoising’ entra en vigor. Contamos con todo ello para intentar reconducir nuestra situación», ha dicho el piloto británico.
La trayectoria de McLaren ha sido un tanto errática este año. De 15º en Baréin –la prueba inaugural– a podio en Imola, para tener problemas en Bakú y Canadá, especialmente en Montreal, donde los dos coches acabaron fuera de los puntos.
Norris ha mostrado su sorpresa por las variaciones de prestaciones de un Gran Premio a otro. «Hasta ahora las prestaciones han fluctuado de forma espectacular de un circuito a otro. Era previsible que hubiese unas ciertas variaciones porque los equipos deben habituarse a las nuevas reglas técnicas… ¡pero no con esta amplitud! Es algo que no he visto nunca», ha dicho Lando.
Pero esto no sólo le ha sucedido a McLaren, sino a casi todos los equipos, al menos los de ‘segunda división’, porque Red Bull y Ferrari están siempre arriba y Mercedes escapa muchas veces a la ‘segunda división’, pero Norris está preocupado por McLaren, obviamente.
Precisamente esta fluctuación de la eficacia, cuya causa desconocen en McLaren, o al menos no han dado todavía con la solución, es a la vez una esperanza para Norris, «porque significa que las cosas pueden cambiar rápidamente. Montreal fue un infierno para nosotros, pero no hay ninguna razón por la cual no podamos ser mucho más competitivos en la carrera de casa».
Norris es consciente de que en Silverstone casi todos los equipos traerán novedades. Salvo Ferrari, AlphaTauri y Sauber, todos tienen sus bases a pocos kilómetros del circuito y de viernes a sábado pueden llegar sin problemas piezas nuevas o esa pequeña modificación que mejore el comportamiento.
