Sergio Pérez ha tenido una clasificación complicada en el GP de Hungría F1 2022. El mexicano se ha quedado fuera en Q2, undécimo, luego de que no pudiera mejorar su tiempo en el último intento al verse molestado por Kevin Magnussen.
Checo ha estado un paso por detrás de su compañero de equipo este fin de semana. En clasificación se notó más, aunque en la Q1 pasó desapercibido. Sin embargo, fue en la Q2 donde acusó su falta de ritmo, y también de suerte.
El primer intento del de Red Bull fue invalidado por Dirección de Carrera por sobrepasar los límites de la pista en la curva 5. Sin embargo, en la repetición por televisión se apreciaba que no era así, ya que sus ruedas derechas pisaban la línea blanca. Con pocos minutos por delante, los comisarios reinstauraron el tiempo de Checo, pero sólo le valía para ser octavo.
Ya en pista con neumáticos nuevos, el de Guadalajara no pudo mejorar, ya que se encontró con el Haas de Kevin Magnussen en la curva 2, lo que torpedeó su vuelta. Undécimo lugar para Sergio Pérez en Hungría, y segunda vez fuera de la Q3 en este 2022.
«La clasificación no ha ido como esperábamos. He tenido que usar un segundo juego de neumáticos blandos en Q2 porque mi primera vuelta fue eliminada por límites de pista, pero luego me la devolvieron. Eso ya había hecho mella en nuestra sesión. Ha sido una situación extraña», ha indicado Checo tras la clasificación en Hungría.
«Cuando salí de nuevo, Kevin –Magnussen– se interpuso en mi camino en la curva 2 y perdí unas cuantas décimas, ya que tuve que abrirme demasiado en la curva y no lo pude recuperar el resto de la vuelta. Desafortunadamente, no pude hacer más. No ha sido una buena clasificación», ha señalado.
Sin embargo, Pérez es optimista de cara a la carrera de mañana, aunque afirma no sentirse cómodo con el coche: «No me siento bien con el coche de momento, pero mañana tiene que ir mejor. Deberíamos tener mejor ritmo, y esperamos recuperarnos para sumar unos buenos puntos», ha resaltado para terminar.
