«Leclerc y Sainz tienen libertat total. Nuestra estrategia es lograr el máximo de puntos para el equipo», ha declarado Mattia Binotto en la conferencia de prensa de esta mañana de los jefes de equipo.
Binotto tiene en cuenta que entre sus dos pilotos media sólo 11 puntos, una diferencia tan exigua que aplicar órdenes podría ser contraproducente a muy corto plazo.
«Además del Mundial de Pilotos está el de Constructores. Y pensamos que esta estrategia –la de buscar los máximos puntos de Constructores– favorecemos asimismo a nuestros pilotos. Tal como están las cosas en la actualidad, son libres de luchar», señaló el jefe del equipo Ferrari.
Eso sí, ‘libertad bien entendida’Merc. Es decir, prohibido tocarse entre ellos y una vez la carrera esté ya decidida posiblemente se impondrá respetar las posiciones. Y posiblemente ello se aplicará asimismo en la carrera sprint, donde un error acabaría teniendo graves consecuencias para la carrera.
Binotto sabe que en Austria tienen coche para ganar y quiere aprovechar que Sergio Pérez sale retrasado para arañar el mayor número de puntos a Red Bull, aunque lo lógico es que Sergio pueda remontar alguna posición en la carrera sprint, salir un poco más adelante en el Gran Premio y remontar hasta la cuarta o quinta plaza, con permiso de Mercedes.
Los austríacos están 63 puntos por delante en la clasificación de constructores. Pueden parecer pocos a estas alturas del campeonato, pero sin duda son difíciles de remontar porque es muy difícil que otro equipo coloque sus coches entre Ferrari y Red Bull, así que hay que tener paciencia.
Obviamente, saltó el tema de la reunión con Leclerc en Mónaco. Binotto echo pelotas fuera, sin desvelar nada. «Simplemente, entre dos carreras consecutivas, Charles estaba en Mónaco descansando y era más sencillo desplazarse hasta allí para hablar con él. Juntos hemos reído y bromeado sobre lo que se lee en los periódicos, porque no es verdad».
